Según Harvard Health, el "iWatch, FitBit, Garmin y Oura Ring todos estos relojes inteligentes han revolucionado la forma en la cual le damos seguimiento a nuestra salud y bienestar. Una de cada cinco personas tiene uno. 

De pasos y calorías a latidos del corazón y el sueño, su reloj inteligente le da seguimiento a todo.

Los estudios demuestran que las personas que hacen un seguimiento de su salud con un dispositivo inteligente aumentan su actividad física 50 minutos más a la semana y dan 1.200 pasos más al día.

Las alertas sanitarias pueden detectar posibles problemas de salud, como latidos irregulares del corazón, ¿Pero será que estos relojes inteligentes siempre aciertan?

"Son buenos puntos de partida, pero no funcionan igual para todo el mundo", agrega Vanessa Volpe, PhD Health Psychologist North Carolina State University.

El equipo de la psicóloga Vanessa Volpe de la universidad estatal de NC pone a prueba los relojes inteligentes.

"Si alguna vez le das la vuelta a ese dispositivo, a veces puedes ver una luz verde, saliendo de la parte trasera de ese dispositivo", agrega Vanessa Volpe, PhD.

La luz verde se envía a través de la piel y se refleja a los sensores del reloj, pero Volpe dice que la luz verde se refleja de forma diferente en distintos tonos de piel.

"Si tienes más melanina en la piel, es decir, si tu piel es más oscura, la luz no penetrará ni se reflejará en la misma medida", agrega Vanessa Volpe, PhD.

Volpe dice que la señal reflejada para las personas de color puede ser tan baja como la mitad de la señal y podría tener repercusiones en las mediciones de la frecuencia cardíaca, la presión sanguínea y los ritmos cardiacos irregulares.

"La propia tecnología, tal y como se diseñó, no tenía en cuenta a las personas con diferentes tonos de piel, especialmente a las personas con tonos de piel más oscuros", agrega Vanessa Volpe, PhD.

Volpe considera esta discrepancia un signo de la incapacidad del sector médico para determinar el impacto de la raza en la salud y espera que sus hallazgos ayuden a abordar las disparidades raciales en la atención sanitaria. 

Otra desventaja de llevar la información sanitaria en la manga, es que tu información puede ser rastreada por terceras personas buscando robar tu identidad.

Los datos de las aplicaciones de entrenamiento no están protegidos como la información sanitaria por la ley de HIPAA, lo que significa que pueden ser vendidos o compartidos con intermediarios de datos, o para usar la informacion con fines de robo de identidad. 

Los monitores de entrenamiento suelen conectarse al teléfono del usuario a través de Bluetooth, lo que deja los datos personales expuestos a la piratería informática. Para protegerse, asegúrese de cambiar la configuración predeterminada de su entrenamiento para que su información no pueda ser compartida.