Katherine es originaria de Venezuela, lleva varios meses en la capital mexicana, ella y otras personas originarias de países como Perú y Colombia más tienen que estar en la calle, ya que este albergue donde pasaban la noche fue cerró de un día para otro.

 “Ahí habíamos varios y a pesar de que lo cerraron, nos quedamos algunos y otros se fueron, otros se entregaron y así”, agrega Katherine, migrante de Venezuela.

De acuerdo con las autoridades encargadas de este albergue, la casa del migrante cerró definitivamente porque esta no cuenta con las condiciones para brindar apoyo digno a las personas, además de que cada vez era más la demanda de migrantes que llegan de paso para ir a los Estados Unidos.

“Si hay buena gente, pero también hay gente mala que no quieren que uno esté aquí”, agrega José Chinchilla, migrante de Honduras.

Katerine dijo que ahora solo busca la forma económica para poder salir de México, ya que logró sacar su cita con las autoridades de los Estados Unidos a través de la aplicación de CBP One, por lo que dice ya no tendrá que estar más viviendo en la calle.

Se sabe que en esta casa del migrante, tiene una capacidad de 200 personas, de los cuales los mismos extranjeros son los que ayudaban a administrar este lugar y estaba dividido en dos secciones, uno para mujeres y otro para hombres y además solo tenían 15 min para poder utilizar el agua.

La llegada de migrantes principalmente de Venezuela a México ha incrementado de forma radical, ya que en 2018 se tuvo un registro de 288 personas, mientras que en los primeros siete meses de este 2024 incrementó a casi 241.000 migrantes, por otro lado, el instituto nacional de migración dio a conocer que durante la administración del presidente obrador se han refugiado 1.74 millones de migrantes en este país.