WESLACO – Son pocos los centros de salud mental en el Valle del Río Grande y eso lleva a muchos de los residentes de la región a buscar ayuda en sus iglesias.

Por eso la Alianza Nacional de Enfermedades Mentales pidió que se liberen más fondos para que las iglesias puedan ayudar a lidiar con el problema. Los representantes de la alianza visitaron el Valle para visitar las iglesias.

“Ellos saben tratar los problemas espirituales. Conocen los problemas económicos. Ellos tienen conocimientos sobre muchas cosas, pero no están realmente equipados para tratar con trastornos mentales”, comentó Stephanie Contreras, directora ejecutiva de la alianza en el Valle.

“Intentamos entrar a las iglesias y dar a conocer a la gente que existimos y que estamos dispuestos a ayudar”, comentó Contreras.

Contreras llegó a la Iglesia Episcopal de San Juan en McAllen y realizo una presentación de 5 minutos para que la gente tenga conocimiento de las enfermedades mentales.

“Hablamos un poco acerca de una experiencia personal sobre lo que le sucede a una familia cuando existe un trastorno mental. Después hablamos de lo que podemos hacer… y esto no es necesariamente en base a la fe; es lo que elegí incluir en la carta como prevención para el suicidio”, comentó Contreras.

Jim Nelson, sacerdote de la iglesia, comenzó su entrenamiento de seminarista en un hospital federal de salud mental en Washington DC. El reconoce las señales. Ahora, quiere que otros también lo hagan.

“Todos, todas las personas tienen contacto con los trastornos mentales, de una u otra manera… particularmente personas que comparten mi vocación”, dijo Nelson.

Nelson cree que todas las iglesias en el Valle necesitan esta información.

“Esta es una presentación que de alguna manera debería estar en todas las congregaciones – sin importar a qué denominación pertenecen, o sin denominación. Todos necesitamos recordar que… existen y que existen recursos”, dijo Nelson.

Contreras explica que uno de cada cuatro personas en Texas tendrá algún trastorno mental o un miembro de la familia tendrá un diagnóstico.

“Los suicidios no deben ocurrir… las personas no desean morir”, comentó.

Contreras dijo que una persona con una enfermedad mental es ocho veces más propensa en convertirse en víctima de un crimen violento que un sospechoso.

La Alianza Nacional de Enfermedades Mentales ofrece clases de apoyo gratuitas.